And the winner is... Nunca correrás solo!

jueves, 21 de abril de 2011

En la crónica de mi carrera me quedaban cosas por decir, algo que para mí fue muy importante durante la maratón y que creo debería contar en nuestro blog, pues al fin y al cabo es algo que nos atañe a todos. 

La Escuadra del Nunca momentos previos. Foto cortesía de Jaime.

Cuando uno se enfrenta por primera vez a algo tan inmenso como una maratón son muchas las sensaciones que nos encontramos, como también las gratas sorpresas que depara una carrera como esta. Para mí, personalmente, ha supuesto mucho, me ha ayudado a seguir creciendo como persona y a valorar gestos que considero deben mencionarse. Porque efectivamente, como todos sabéis, yo no corrí sola, sino que lo hice acompañada de mi padre, de Abe, de Jaime, de Ángel y de otros amigos del asfalto, como son Jan y Rául. Porque en el caso particular de Abe y Jaime, posiblemente sabiendo que el ritmo impuesto desde el principio era quizás demasiado rápido para sostener durante toda la carrera, siguieron a mi paso hasta que las fuerzas dijeron basta. Y eso solo lo puede hacer alguien a quien le importan otras cosas a parte de ritmos, triunfos personales o marcas. Y por supuesto tengo que mencionar a Ángel, quien pasado el kilómetro 3 de la prueba inició su andadura en solitario para pararse un kilómetro después y esperarnos, sencillamente porque no quiere correr solo, porque ante todo es una gran persona que sabe disfrutar de esto del correr, que le interesa más vivir la experiencia rodeado de sus amigos del Nunca que batirse a sí mismo.

Mi mención especial también a Gustavo, quien reventó el crono en 3h13'46" demostrando lo grande que es, y también Carlos, "el Churry", quien nos esperó alrededor del kilómetro 30 para echarnos una mano y viendo lo bien que íbamos mi padre, Ángel y yo, se quedó a esperar a Abe para ayudarle a llegar a meta. 


Y mi padre, Saturnino, qué decir... Fue el motor de la maratón, la cabeza, todo lo llevó a la perfección para que ese día fuera el más especial de todos. Darle las gracias sería quedarme corta...

Abe, Saturnino, servidora, Ángel de la Mata, Ángel y Carlos.

El domingo no sé quién ganó la prueba, y tampoco me importa. Lo único que sé es que el Nunca "subió" al número 1 del cajón porque hizo gala de su nombre, y además a lo grande. Así que no me queda otra que dar las gracias al equipo, porque el éxito que no puede compartirse no deja satisfacción alguna.

4 comentarios:

Saturnino dijo...

Somos un gran grupo.
Gracias a todos por haber estar en esta historia.
Un abrazo.

amador dijo...

Que bonito Sonia!, me alegro de que todo haya ido bien en tu primera maratón.

Abe dijo...

Compartir, precioso verbo en su segunda acepción "participar en algo"... Yo particularmente me siento un privilegiado por haber corrido hasta donde pude con todos vosotros, básicamente entreno para intentarlo y a poco que me respeten los dolores volveré a hacerlo, incluso a esos "super-ritmos" ;-)
!!!Besos y abrazos para todos a discreción¡¡¡

Ángel dijo...

La verdad es que lo que más llena en estos eventos, a parte de la propia carrera con lo que conlleva de superación personal, son esos pequeños y grandes momentos que se viven antes, durante y al finalizar la prueba, y que se comparten con aquellos a los que más queremos y de los que más cerca nos sentimos.
¡¡¡Abrazos a todos!!!